Entender la educación como un
derecho inalienable de todos los ciudadanos Argentinos, pensar una sociedad
igualitaria, justa y democrática, es fortalecer el esfuerzo de un pueblo que
sostiene permanentemente la reconstrucción social a través de la inclusión. Un
inmenso campo de significaciones detrás de cada barrio, de cada persona, un
momento de felicidad encontrado desde hace unos años por un grupo de
alfabetizadoras populares que vienen trabajando en distintos zonas de Florencio
Varela.
Brillan los ojos y se
transparenta alegría, sonrisas y militancia social en la charla con las
cooperativistas Elvira Luna, Paola Díaz, Griselda Escalante y Carmen Churquina, donde se cuentan historias
de vida, detrás un importante trabajo de construcción educativa.
“Por ahí, con una palabra, tenés
todo el encuentro de ese día”, sostiene Paola y nos sumergimos en lo que significa
vivir y estar expulsado en una sociedad que está pensada e ideada para los que
leen y escriben.
¿Para ustedes qué representa el
trabajo de alfabetizar?
Elvira: salir de la estructura, porque a las personas les molesta mucho las
estructuras, los aburre que todos los días vean lo mismo, de la misma forma,
con el mismo sentido. A la gente mayor no le agrada sentirse como un niño,
ellos quieren aprender, pero no quieren ser tratados como un niño. Tomás un
mate, conversas, por ahí mientras trabajás una palabra se hacen chistes, el
clima y la situación es mucho más a meno.
Paola: es llagar a poder enseñarles que nosotros aprendemos de ellos y ellos
aprenden de nosotros, desde su vida,
sus problemáticas, de sus cosas y no arrancar con el abecedario. Empezar a
conocernos y capaz que va haber una semana o varios días de charla en los
cuales no vas a escribir nada y hay muchas personas que te dicen: ¿Hoy no vamos
hacer nada?, y uno le dice: ¿Qué tenés ganas de hacer? , charlemos, ¿Tenés
ganas de escribirme algo? es la respuesta más frecuente.
A raíz de las motivaciones que surjan, te vas a dar cuenta de la ayuda
que necesitan.
Carmen: es un abanico de experiencias porque rescatás desde lo educativo y
social cómo vivió cada persona, cual fue el motivo por el que no pudo seguir
estudiando y la historia de vida desde que nace hasta ahora. Está bueno que se
sume la tiza y el pizarrón al barrio, más allá de una escuela, es quitarle los
miedos.
Griselda: es la búsqueda de cada persona, porque puede tener un buen trabajo y
nunca le hizo falta leer y escribir, pero llega un momento en la vida en que la
persona quiere acceder a leer una carta o mandar un mensaje por el celular, por
la simple cuestión de tener una posibilidad.
¿Por qué surge la inquietud de
salir a alfabetizar?
Paola: para incluirlos, desde algún punto de vista, porque nadie es
analfabeto, porque conozco personas que no saben leer y escribir, pero llegaron
hasta a una etapa de sus vidas que hoy por hoy están trabajando y habría que
preguntarse como hicieron para llegar hasta ahí y estar bien. Lo que significa
que no pudieron desarrollar la lecto-escritura pero de algún modo leen la vida.
Elvira: en mi experiencia, el caso de mi compañero Leiva, que recién ahora lo
vuelvo a recuperar porque no le daban tiempo en el trabajo. El vio la
posibilidad de venir a mi casa, dos horas por la tarde, fuera del horario de
trabajo, para venir a estudiar.
Ahora en este momento el sabe deletrear y es importantísimo su avance.
Griselda: porque habían compañeros de la cooperativa que no estaban de acuerdo en
quedarse dos horas en el obrador para estudiar, ellos preferían salir y
entonces nosotras nos sentimos como que no sabíamos qué hacer y ahí empezamos a
salir a los barrios. Salimos a buscar instituciones, espacios para poder
trabajar en alfabetización.
¿Cuál es el vínculo que se
establece entre alfabetizador y alfabetizado?
Griselda: en mi caso, por
ejemplo, me tocaron seis adolescentes el año pasado, en un hogar donde eran
llevadas por problemas de familia. Ellas no querían aprender nada del colegio,
solo querían hablar y esa fue la forma
de aprender juntas, escuchándolas. Luego la referente del lugar las quiso
ubicar en colegios, pero al no tener la documentación necesaria la tarea se
complicó demasiado. Una vez que lograron ubicarla, me vinieron a buscar, para
que yo vaya a la institución y compartiéramos un momento juntas.
Paola: es un vínculo de apoyo,
amistad, compañerismo. Lo más importante es que tengan una oreja que les de la
posibilidad de ser escuchados.
¿Cómo pueden observar el camino
transitado desde la alfabetización hasta llegar al FinEs 2?
Carmen: es el mismo derecho que comienza
en la búsqueda interna de cada persona a través de la alfabetización y siguiendo el camino hacia la
culminación de los estudios secundarios.
Paola: es la misma inclusión para todos, es
un mismo derecho. Yo me di cuenta de la importancia de lo que estaba
haciendo. Uno no se da cuenta de la magnitud de lo que hace, cuando lo ve
reflejado en algún material. Lo vas haciendo porque te gusta y vas aprendiendo
en el camino.
Griselda: la sociedad a veces no le da la importancia que se merece. A veces
confunden apoyo escolar con alfabetización y la verdad que no es lo mismo. No
ven importante la tarea de alfabetizar.
Elvira: a veces hay gente detractora que dice: ¿no, para qué? Entonces vos
decís bueno, lo poco que tengo de conocimiento para poder compartir con otra
persona queda en la nada. Yo siempre
pensé que cuando uno menos sabe, es mejor para las otras personas por que sos
más dominable y cuando uno aprende a leer y escribir podes desarrollarte y no
sos tan dominable. Cuando menos sepas mejor, así más podemos aprender.
Un lugar donde los conocimientos
se ponen en contacto, la recuperación de la experiencia y la valorización de las
personas a través de su reconocimiento, es la acción que hace posible un camino
de fortalecimiento en la comunidad. Mujeres unidas y organizadas por la ganas
de trabajar por una sociedad más justa y con los mismos derechos
para sus ciudadanos.
